jueves, 29 de noviembre de 2012
No Soy Yo... Cap. 19.0
Hoy descubrí muchas cosas, una de ellas fue que Zache no va a al mismo instituto que yo. Fue algo que noté inmediatamente en la mañana. Mientras yo preparaba mis útiles y lo que me iba a poner, Zache se pone un uniforme diferente. Quise preguntarle porque pero mejor decidí indagar en "mis recuerdos", aunque los recuerdos siempre aparecen en un tono blanco y negro, no encontré algo relacionado con eso. Así que lo primero que hice fue seguirlo por todo el camino, no me importaba que llegara tarde al instituto, traté de ser lo más sigilosa posible, sin embargo...
-¿Qué haces aquí? -Deja de caminar y se voltea lentamente con una mirada muy seria-. ¿No deberías ir a tu instituto? -Salgo de mi escondite con una mirada curiosa y triste a la vez.
-Quería acompañarte, pero te fuiste tan rápido que no tuve tiempo de preguntarte. ¿Te importa si te acompaño? -Le dedico una mirada suplicante para que el acepte, pero lo único que hace es suspirar y hacerme un gesto para que me acerque.
Finalmente llegamos a su instituto y me quedo muy sorprendida a que a donde el va a estudiar es muy diferente comparado con el mío.
-Lo sé, no es nada comparado a donde tú vas, pero es todo lo que puede pagar nuestro papá para mí por ahora. -Trata de bromear pero no le sale.
<<¡¿Qué?! ¿Cómo que lo único que puede pagar? No entiendo nada.>> Me limito a preguntarle y trato de recordar, recuerdo cuando mamá nos dejó. Los años siguientes papá estuvo bebiendo, había días en que llegaba muy borracho y lo único que hacía Zache era protegerme de él metiéndome a mi cuarto para que perdiera el tiempo o para que me vaya a dormir.
Antes de que me dé cuenta empiezan a caer constantemente lágrimas de mis ojos. Zache se apresura a abrazarme, llenándome de cariño y amor, cosa que no tuve la oportunidad de recibir desde que mamá se largó.
-Liuva, perdóname no fue mi intención hacerte llorar, no te sientas culpable por nuestra situación. Sabes que estoy haciendo todo lo posible para que tú estés bien. No llores Más... Te lo suplico... -Me mira con unos ojos cargados con demasiada tristeza que se con certeza que no falta mucho para que el me acompañe con mi llanto.
-Está bien, solo que recordé ese día tan triste. Sé que no es tu culpa y que te estás esforzando al máximo pero no veo justo que yo gane mejores cosas y oportunidades que tu. -Mis ojos y mi alma dejaron de llorar, miré a Zache fijamente con una cara con la que podemos interpretar un "gracias por todo". Zache asiente y para no hacerme perder más tiempo me abraza y me susurra que me quiere. Yo solo veo como camina hacia la entrada de su instituto, algo que por primera vez en muchos años nos separa, ya que en mis recuerdos reales, no recuerdo casi ningún día en el que no estemos juntos. Los únicos días que no estábamos juntos eran esos cuando estaba con su novia, Jenna.
Jenna, que nombre tan curioso, se que acabo de pensar en ese nombre hace algunos minutos pero, no logro recordar de donde lo saqué, trato de recordar su cara o algo con que la identifique, pero nada. Ella no aparece en mis recuerdos.
Una exclamación y cara de sorpresa se me escaparon, recordé que Jenna fue novia de mi hermano, y que, como mi hermano no viene conmigo, quizá nunca conoció a Jenna. Así que puedo vivir mi vida en paz sin que ella y yo nos estemos peleando. No sé cómo se me pudo haber escapado esa persona la cual odio con todo mi corazón y que me robó a mi hermano.
Recuerdo rápidamente que yo también tengo clases y me voy corriendo. En el camino voy escuchando una carcajada algo baja de una persona que conozco bien, sin embargo no recuerdo, hasta que llego a mi instituto casi jadeando, pero si no corría, me hubieran cerrado la puerta en mi cara. Miro atrás para ver como la cierran, pero lo que en realidad quería ver era quien me estaba persiguiendo. Pero solo vi una sombra muy familiar.
Por: Mariana Badillo ^^
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