El presidente del Comité Olímpico Mexicano, licenciado Felipe Muñoz Kapamas consciente de la urgente necesidad de implementar medidas preventivas y promover acciones en contra del consumo de sustancias prohibidas entre nuestros atletas, lanzó la Campaña Nacional para la Excelencia Olímpica y Juego Limpio.
Durante los pasados Juegos Centroamericanos y del Caribe Mayagüez 2010, se realizaron más de 600 exámenes antidoping y a México le correspondió presentarse a más de 100, es decir de cada seis pruebas, en uno intervenía un atleta mexicano, al final, cinco atletas mexicanos tuvieron resultados analíticos adversos en las disciplinas de levantamiento de pesas, pentatlón, atletismo, nado sincronizado y basquetbol, “cuando nos enteramos de que cinco de nuestros deportistas tuvieron resultados adversos, realmente nos preocupamos”.
Un resultado adverso hubiera sido suficiente para fortalecer nuestros esfuerzos en la lucha contra el dopaje, porque la meta es y ha sido siempre “cero deportistas con resultados positivos. El doping no debe darse en nuestros atletas”.
Pero ante los resultados en los exámenes antidoping de la justa regional, “hemos decidido lanzar esta gran campaña contra el dopaje y a favor de Juego Limpio, en la que nos involucremos a todas las federaciones deportivas mexicanas, a todos los institutos del deporte de los estados, y organismos deportivos. En sí a todos los que tengan que ver con el deporte de México”.
La Campaña Nacional Para la Excelencia Olímpica y el Juego Limpio tiene como objetivo fundamental comprometer a la estructura deportiva nacional representada en el Sistema Nacional del Deporte, así como a la sociedad mexicana en su conjunto, para difundir, impulsar y aplicar los valores del deporte olímpico con el fin de elevar a niveles superiores al deporte de México eliminando el dopaje y toda forma de desviación que vulnera la integridad y prestigio del deporte nacional.
Para cumplir plenamente esta importante tarea, se requiere de la decisiva colaboración de las federaciones deportivas mexicanas y de los institutos deportivos estatales a los cuales pertenecen los atletas; así como del personal que tenga injerencia directa en el comportamiento ético y moral de los deportistas en preparación y competencia.
La Excelencia Olímpica es un estado armónico que conjuga la máxima capacidad físico-técnica de los atletas con la más alta expresión del espíritu olímpico. Significa la máxima exaltación de la naturaleza humana, dentro de los límites de su estado original, puesta a prueba en las competencias.
Los atletas solo pueden alcanzar la excelencia olímpica con el conocimiento, interiorización y dominio de los principios y valores del movimiento olímpico moderno. Esto les da la conciencia de que a toda manifestación deportiva, deben llevarla con honor y dignidad por ser la expresión visible del legado olímpico de la antigüedad y de los Juegos Olímpicos Modernos.
La Excelencia Olímpica alcanzada por un atleta supera los límites de la individualidad y dignifica ineludiblemente al grupo socio-cultural que le ha encomendado el delicado honor de su representación en las competencias deportivas olímpicas.
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