viernes, 24 de junio de 2011

El Futbol: ¿Religión? ¿Negocio? o ¿Circo? - Su Función social

La existencia de diversas funciones en el futbol supone la posibilidad de agruparlas bajo distintos criterios:

La función social La función económica La función política y La función cultural.


El futbol es el espectáculo con más seguidores en todo el mundo. Nos incita al consumismo y produce héroes, imágenes de esfuerzo, de dedicación, grandes modelos para los niños.

Pero no todo el mundo tiene una visión tan positiva, algunos opinan que el futbol es una distracción que impide que la población se preocupe por los problemas realmente importantes, como la pobreza, la crisis, la deuda pública, el terrorismo, la reforma laboral o la progresiva pérdida de los valores sobre los que la sociedad se asienta. Que los grandes poderes lo utilizan para anestesiar la opinión pública permitiéndoles así ejecutar sus estrategias con total impunidad.


En muchos países el futbol está inmerso en la cultura nacional y muchos aspectos de la vida giran en torno a él. Se publican diarios y revistas de futbol, hay programas de radio exclusivos, canales de televisión, etc. Se ha comprobado que el fútbol cambia los estados de ánimo e influye en amplios sectores de la población a nivel de regiones e incluso países. La victoria en un gran torneo trae felicidad a la comunidad local o al país e influye directamente en el autoestima colectivo. Inversamente, la derrota puede provocar tristeza y aumenta la mortalidad en la población. Hasta se han establecido asociaciones entre la economía y la victoria en torneos importantes.


Cabe señalar que este deporte como espectáculo, permite al espectador en vivo o a través de un medio, el despedir una gran cantidad de energía acumulada y reprimida, así como tener un pretexto para la convivencia, que en el mejor de los casos será familiar.

El análisis a fonde exige mucho más detalle, espacio y tiempo, así que me limito a lanzar las ideas que van llegando a mi mente.

La realidad es que el futbol es un negocio muy redituable, ganancias millonarias se generan a partir del rey de los deportes, ¿dónde queda el espíritu deportivo y la competencia sana? En ocasiones me pregunto cómo un sólo jugador puede obtener en un mes, el dinero que probablemente obtiene una población entera en un año. Estas contradicciones son las que parecen quitarle el caracter de deporte a esta disciplina, pero más allá del contexto, el futbol encuentra su sentido más puro en las calles, en las cascaritas y coladeras, en los deportivos, en los patios de las casas, en los jardines públicos y en cada espacio donde la creatividad e imaginación crean impresionantes héroes del balón, en donde se reproduce la idea primordial: competir es propio del ser humano.


Profr. Juan

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