Datos Ùtiles En Pares

¿Por qué mirar al sol nos da ganas de estornudar?

Se llama estornudo fótico, y le pa­sa a entre el 15 y el 25% de las personas. Puede deberse a una disfunción congénita en el envío de se­ñales desde las terminaciones nerviosas del trigémino al cerebro.

La hipótesis es que la sobreestimulación luminosa de las zonas oculares conjuntiva y córnea estimula a su vez la zona del nervio trigémino (encargado de la sensibilidad de la región), lo que provoca el reflejo de estornudo.

Descansar para crecer

Todas las revistas del tema hacen hincapié en el entrenamiento y la ingesta (además de los cientos de anuncios sobre suplementos caros, absurdos e innecesarios), pero ninguna se preocupa del descanso. El cuerpo necesita descansar, se repara y crece durmiendo.

¿Has visto cuanto ejercicio hace un bebé?. Ninguno.. Pues bien, ¡dobla su peso en un tiempo record!, y luego lo triplica, cuadruplica.... ¿Cómo puede ser eso?. Pues por el mero hecho de que el músculo crece en el descanso, no durante el ejercicio, y eso siempre que disponga de nutrientes suficientes.

Al igual que el bebé tiene un disparador genético que le estimula a crecer, nuestro estímulo es el ejercicio intenso en la sala de pesas; pero mientras nos entrenamos, el músculo no crece, es más, se deteriora y pierde fuerza. El cuerpo, al detectar este deterioro, y si le damos material suficiente y un tiempo prudencial de descanso, repara esos daños, y si puede, aumenta su capacidad para que ese mismo estímulo no le dañe la próxima vez; por eso hemos de aumentar la carga cada semana de entrenamiento.

Duerme todo lo que puedas, 7 horas mínimo todos los días, y si son ocho mejor. Además, una siestecita siempre ayuda. Durante el sueño hay un aumento de las hormonas anabólicas (como la GH), que estimulan el crecimiento muscular y la reparación de tejidos, de modo que ¿qué importancia tiene el show de la tele a medianoche, si lo que quieres es crecer? Durante el sueño, especialmente en los primeros 50 o 60 minutos, se libera la mayor cantidad de hormona del crecimiento. Esta sustancia química actúa sobre los tejidos del cuerpo y su principal efecto es favorecer el crecimiento, sobre todo en los niños.